Tras la firma de un decreto por parte del gobernador Omar Perotti, la mayor parte de la administración pública de la provincia de Santa Fe cesó las actividades desde hoy y hasta el 31 de enero.

 

Esta disposición, parecida a la que adoptaron otros  dos mandatarios justiacialistas, Jorge Obeid y Carlos Reutemann en 1999 y 2003, respectivamente, persigue el propósito de ahorrar energía eléctrica y posponer pagos. Como así también, regularizar las licencias anuales ordinarias.

 

Quedaron excluidas algunas reparticiones tales como efectores de salud, Centros de Atención Primaria, el Intituto Autárquico Provincial de Obra Social (IAPOS), comisarías y subcomisarías, entre otras.