Los precios subieron 1,9 por ciento y acumulan desde diciembre un incremento de 12,5 por ciento. Transporte y comunicaciones impulsaron las alzas.
La inflación de mayo en la provincia de Santa Fe fue del 1,9 por ciento, seis décimas más que la que difundió el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) como referencia nacional. Se alineó, en este sentido, con las mediciones de las consultoras privadas y las que difunden los diputados opositores en el Congreso nacional.
En relación a diciembre del año pasado, la inflación acumula 12,5 por ciento, mientras que el acumulado de 12 meses fue de 25,5 por ciento. De acuerdo al Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec), el rubro de transporte y comunicaciones fue el que más subió en mayo, un 4,9 por ciento. Le siguió educación, con un incremento de precios de 4,6 por ciento, e indumentaria, con el 3 por ciento.
Atención médica y gastos para la salud mantienen una tendencia alcista, con 1,9 por ciento. Desaceleraron vivienda y servicios básicos (0,1 por ciento) y alimentos y bebidas (1 por ciento).
Si bien la inflación provincial se ubicó varias décimas por encima de la nacional, el IPC de mayo marcó una desaceleración respecto de las anteriores mediciones del Ipec. El aumento de precios más pronunciado en la provincia se dio en el mes de marzo, con un 2,8 por ciento, seguido por febrero (2,7 por ciento), abril (2,4 por ciento) y enero (2,1 por ciento). Con una cifra por debajo del 2 por ciento (1,9 por ciento), mayo se convirtió en el mes con inflación más baja en lo que va del año.
En términos anuales, vivienda y servicios básicos (tarifas y alquileres) lidera las subas con un 38,8 por ciento, atención médica y gastos de la salud le sigue con un 36,5 por ciento y en el tercer lugar se ubica educación (30,1 por ciento). En otro lote revisten transporte y comunicaciones (28,2 por ciento), esparcimiento (27,1 por ciento) y alimentos y bebidas (24,1 por ciento).
Para confeccionar el IPC de Santa Fe, el Ipec releva mensualmente 22.400 precios en mil locales informantes. En el relevo se visitan los establecimientos supermercados y tradicionales seleccionados para relevar precios de los distintos bienes y servicios que componen la canasta.
En tanto, el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso) midió la inflación en supermercados de mayo para Santa Fe, que arrojó usa suba del 2,54 por ciento. Y señaló que el acumulado anual fue de 29,20 por ciento.
Expectativas
A nivel nacional, las expectativas de inflación de los consumidores argentinos para los próximos doce meses se ubicaron en 27,3 por ciento. Esto es un 0,6 por ciento menos que en marzo.
El cálculo surge del relevamiento realizado por el Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella.
Si bien el indicador muestra en junio su nivel más bajo de los últimos 18 meses, aún se encuentra 10 puntos porcentuales por encima de la meta de inflación que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) impuso para 2017.
Juan José Cruces, director del Centro de Investigación en Finanzas de la UTDT, señaló que, de acuerdo al promedio, las expectativas de inflación suben en la Capital Federal mientras bajan en el interior del país y el Gran Buenos Aires.
«El nivel alcanzado por las expectativas en el Gran Buenos Aires es el más bajo desde noviembre de 2015. De acuerdo al promedio, las expectativas de inflación suben en la Capital Federal mientras que bajan en el interior del país y el Gran Buenos Aires», señaló la casa de estudios.
Sectores
El CIF destaca que «en la distribución por nivel de ingreso, según la mediana, las expectativas de inflación caen para los sectores de ingresos bajos mientras que se mantienen para aquellos de ingresos altos».
«De acuerdo a la mediana, las expectativas de inflación caen cinco puntos porcentuales para los sectores de menores ingresos, marcando 20 por ciento», señala el CIF.
El informe de la universidad agrega que «para los sectores de ingresos altos se mantienen en 20 por ciento».
Según el Indec, la línea de pobreza es de 14.665 pesos
Los precios de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y de la Total (CBT) subieron durante mayo el 1,01 por ciento, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). De esta manera, una familia con dos niños de 8 y 5 años requirió el mes pasado de $ 5.986,07 para comprar la alimentación indispensable para no caer en la indigencia.
Ese mismo núcleo familiar requirió $ 14.665,88 para adquirir el mes pasado la Canasta Básica Total (CBT), que además de los alimentos incorpora indumentaria y que marca el umbral por debajo de la cual se cae en la línea de la pobreza.
Fuente: Sin Mordaza