La Justicia de Vera le dictó además la prisión preventiva por la muerte de Marina Paiva.

Unas horas antes de que un grupo de jóvenes matara a golpes a dos hombres en la ciudad de Calchaquí, otra tragedia se produjo en otro punto de la urbe, que terminó con la vida de una mujer de 27 años. Marina Gabriela Paiva recibió un impacto de escopeta a la 1.15 de la mañana del sábado 21 de diciembre, cuando transitaba en moto por bulevar Belgrano.

El cuerpo fue hallado en la vereda, entre las calles Ituzaingó y Agustín P. Justo, y casi de inmediato fue puesto tras las rejas un hombre de 65 años con el que habría mantenido una relación sentimental.

El detenido, Oscar Feliciano Giménez, fue apresado mientras deambulaba por las calles aledañas a bordo de un auto, en el que transportaba una escopeta calibre 12 mm. marca Sole, que utilizó para asesinar a Paiva.

Según informó el diario El Litoral, así lo comprendió el juez de Instrucción en feria de los Tribunales de Vera, Nicolás Muse Chemes, que lo procesó por el delito de “homicidio agravado, por haber sido cometido contra una persona con relación de pareja, por alevosía y por el uso de arma de fuego”.

Dos disparos

Asimismo ordenó la prisión preventiva de Giménez, haciendo lugar a la medida restrictiva de la libertad solicitada por el fiscal Nº 2 José Garcia Calvo.

El acusado disparó dos veces contra la indefensa mujer, que recibió un primer impacto en el casco de la moto en la que se conducía y el segundo en la espalda, ocasionándole lesiones de tal gravedad que provocaron su deceso mientras era atendida en el centro de salud de Calchaquí.

Una vez completas las actuaciones sumarias, el expediente pasó a manos del juez en feria para su resolución. Pero debido a la reticencia del imputado en aceptar la autoría del crimen, fue el fiscal en feria judicial, Gustavo Gon, el que debió solicitar una serie de medidas investigativas (testimoniales, constataciones y periciales) en beneficio del esclarecimiento del hecho.

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