La Selección de Personal es un proceso completo e integral que debe alinearse a la estrategia de la Organización, ya que en él se tienen que elegir a los candidatos más idóneos para cubrir la vacante de uno o varios Puestos en la misma. Es un proceso de carácter técnico-administrativo mediante el cual la empresa o colectividad que se trate, busca, examina e incorpora a las personas que precisa.

Este proceso es muy importante porque permite a las empresas poder contar con individuos idóneos y aptos para cumplir sus objetivos organizacionales y, a la vez, disponer de un equipo de Recursos Humanos capacitado y/o especializado de acuerdo a las tareas. Además, constituye una posibilidad para que las personas que forman parte de la organización puedan alcanzar sus metas profesionales y, así, lograr avanzar hacia sus desafíos y aspiraciones personales.

Lo primero que se realiza, una vez dada la búsqueda, es el análisis y descripción del puesto a ocupar, es decir, el relevamiento del mismo. Para ello, se va a recabar información sobre el cargo, por ejemplo las principales tareas que tendrá bajo su responsabilidad la persona que ocupe el Puesto; posiciones que supervisa y principales responsabilidades de cada una; grado de autonomía de los sujetos que le reportan; grado de autoridad que tendrá; capacidades necesarias para desempeñar el cargo –conocimientos, experiencia, competencias, habilidades, etc.-. Cabe destacar, que una Competencia es una habilidad o atributo personal de la conducta de un sujeto, que puede definirse como característica de su comportamiento y, bajo la cual, el comportamiento orientado a la tarea puede clasificarse de forma lógica y fiable. Por ejemplo, en el caso de que se busque un vendedor algunas de las competencias requeridas serían organización y planificación, capacidad para influir en las personas, comunicación y argumentación, etc.

Luego se pasa al reclutamiento donde se busca atraer a los candidatos. De allí, se seleccionan los CV que más se aproximan al perfil del puesto y se cita a los postulantes escogidos a una entrevista para recabar información sobre ellos. Finalizada esta fase, se hace una nueva selección y se administran las técnicas psicológicas para evaluar rasgos de personalidad y/o las competencias y, de esta manera, observar si coinciden o no con el perfil buscado. Finalmente, se realiza una terna de 2-3 candidatos a los que pidieron la búsqueda, siendo la decisión final exclusivamente de ellos y no del psicólogo laboral.