El Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado tiene pensado citar a los partidos políticos con representación legislativa en la última semana de febrero para conversar sobre el proceso comicial.
Para la última semana de febrero el gobierno de la provincia convocará a los partidos políticos con representación parlamentaria a discutir sobre el cronograma electoral de este año. La premisa del Poder Ejecutivo es unificar los comicios locales con el nacional, siempre y cuando se pueda utilizar la boleta única para las categorías municipales y comunales. Ir a las urnas los mismos días implicará un ahorro cercano a los 50 millones de pesos para Santa Fe, ya que buena parte de los operativos –tanto en las primarias abiertas como en la general– correrían por cuenta y orden del Estado argentino.
Si bien es el gobernador Antonio Bonfatti el que tiene la potestad constitucional de definir las fechas electorales, el oficialismo quiere conocer qué tienen para aportar el mosaico de partidos y bloques de las cámaras de Diputados y Senadores. En la previa, un amplio sector del justicialismo y la Coalición Cívica-ARI anticiparon que quieren el desdoblamiento de los comicios para evitar que en Santa Fe se obvie la utilización de la boleta única. Suponen que votar en las mismas fechas implicará tener que respetar la norma de mayor rango institucional. O sea, con una elección nacional habría que usar listas sábanas sí o sí.
El socialismo, en tanto, cree que se puede compatibilizar ambos procesos comiciales sin ningún problema legal u operativo, es decir, la boleta única con los boxes de votación para las categorías municipales y comunales y la boleta sábana con los cuartos oscuros para la categoría de diputados nacionales. Este año en Santa Fe se renuevan todas las comisiones comunales, la mitad de los concejales en cada ciudad y se eligen siete intendentes; mientras que a nivel federal los ciudadanos de toda la provincia deberán elegir a 10 diputados nacionales para el período diciembre 2013-diciembre 2017.
Asimismo, detrás de los posicionamientos específicos sobre el tema están también las estrategias electorales y sus especulaciones. Por caso, el PJ cree que unificar los comicios es volver a la lista sábana –que tantas alegrías les dio en épocas de oficialismo– y no se quieren arriesgar porque la figura de Hermes Binner encabezando una nómina de postulantes a diputados nacionales del Frente Progresista o el Frente Amplio (si no se suma el radicalismo) podría generar un efecto arrastre en las otras categorías locales que estarán en disputa durante el presente año. A su vez, la Coalición Cívica es autora de la ley de boleta única y no quiere ninguna sorpresa sobre el particular.
Es de recordar que el gobierno vetó una ley –autoría del diputado obeidista Mario Lacava– que exigía a la provincia desdoblar los comicios, por entender que esa definición es una responsabilidad constitucional del Ejecutivo. A principios de febrero, Bonfatti envió dicho veto a la Legislatura para que se trate durante el período extraordinario; entonces, del resultante de la reunión de la próxima semana con los partidos políticos en la Casa de Gobierno surgirá la convalidación del texto oficialista o la ratificación de la ley que ideó el PJ.
Menos campaña
En caso de haber sintonía entre las partes, otro elemento en el que se avanzará en la Legislatura es la modificación de la ley de primarias abiertas, simultáneas y obligatorias para achicar el cronograma electoral, que en la actualidad incluye un total de 150 días desde la presentación de listas hasta los comicios generales. Eso implica, desde el punto de vista político, que haya cinco meses de campaña electoral en la provincia.
La iniciativa ya cuenta con media sanción del Senado, a instancia de un proyecto que elaboró Danilo Capitani (PJ-San Jerónimo). En tal sentido, el texto establece que la elección general debiera realizarse entre los 42 y 56 días corridos desde las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias. A su vez, la inscripción de las listas de candidatos deberá hacerse “desde la publicación de la convocatoria de dichas elecciones y hasta 50 días anteriores a las mismas”.
Así, en un plazo que apenas podría superar los 100 días todo el proceso electoral quedaría concluido en la provincia de Santa Fe. “Esta reducción en los plazos electorales propuesta se hace indispensable a efectos de recortar los tiempos de campaña electoral, lo cual redundará no sólo en beneficio de los candidatos, sino también de la población en general”, manifestó el legislador justicialista en su oportunidad.
“Esto ayudará muchísimo a los presidentes comunales porque tienen 24 meses de gestión –con el sistema actual–, de los cuales por lo menos seis meses están de campaña”, había expresado el legislador para justificar su iniciativa en octubre del año pasado, cuando la norma consiguió la media sanción.
Otra idea central de la iniciativa es evitar las elecciones internas o primarias abiertas en todas aquellas localidades donde no haya más de una lista por partido, confederación o alianza electoral. Dicha garantía sólo será para los cargos públicos municipales y comunales, no así para las restantes categorías provinciales (gobernador y vice, diputados y senadores).
“En tales casos el Tribunal Electoral de la provincia, previa verificación de los requisitos establecidos en la legislación vigente, oficializará las listas proclamando candidatos a quienes las integren, para la elección general”, dice el texto que reemplazaría a los artículos 2º y 4º de la ley 12.367. De esa forma se ahorrarán esfuerzos políticos, recursos económicos y burocracia administrativa.
Además, se plantea modificar los plazos de presentación de las adhesiones a las listas, que es un paso fundamental para luego poder quedar habilitadas a competir. Serán sólo siete días después de la presentación de los candidatos para las primarias abiertas y con proporciones diferentes de acuerdo a cada categoría. Por ejemplo, para ser candidatos a gobernador, vicegobernador y diputados provinciales, los interesados necesitarán las adhesiones del cuatro por ciento del padrón de afiliados, debiendo incluir –en dicho porcentaje y en igual proporción– la adhesión de afiliados de por lo menos 14 departamentos.
En tanto, la propuesta de modificación de la ley de primarias abiertas establece que las candidaturas a senador provincial necesitarán del cuatro por ciento de afiliados de cada partido, confederación o alianza del departamento respectivo. Las candidaturas para cargos municipales o comunales, “cuatro por ciento en municipios de primera categoría; ocho por ciento en municipios de segunda categoría; 16 por ciento en comunas de cinco miembros; y 25 por ciento en comunas de tres miembros, en todos los casos computados del total del padrón de afiliados de la localidad correspondiente”.