La idea de armar un pesebre en el exterior del templo surge del Padre Walter Venica en el año 2006 quien se lo propone a la señora Elda Franzoy.
María del Carmen Bertolotto y Elda Franzoy se contactan vía internet con Asunción del Paraguay y luego con Areguá, localidad cercana a la capital del vecino país donde se realiza anualmente en los meses de Octubre y Noviembre la Feria Navideña. Allí se comercializan todo tipo de artesanías en cerámica y en estos meses principalmente pesebres de gran tamaño.
De viajes anteriores poseían fotografías tomadas por José Luis Locatelli, las que fueron vistas por el Padre Venica y despertaron aún más su entusiasmo.
Así María del Carmen Bertolotto y Elda viajaron en su automóvil particular a comprar el pesebre y lo traen a Malabrigo. De él faltan dos camellos que debido a su tamaño de ninguna manera pudieron ubicarse en el auto ya que las figuras adquiridas ocupaban la totalidad del vehículo.
Elda y Mabel Colignon diseñan el establo que en su primera versión estaba construido con techo de paja, postes de algarrobo, alfalfa y ladrillos molidos en su base.
Para su armado, muy difícil en un principio colabora fundamentalmente René Victor. Además Rubén Menapace, Sergio y Diego Menapace con integrantes del Grupo Scout, Andrés Sager, Heber Victor y Caro Bordon. En los detalles Mabel Colignon, María del Carmen Bertolotto y Elda Franzoy.
Contaron con el aporte en mano de obra de la Intendencia a cargo en ese periodo por Omar Zampar, colaborando en mayor o menor grado Ariel Massin, Mariela Graziano, Danilo Sager y personal de Maestranza Municipal.
Germán Menapace, Javier Zampar, Miguel Masin, Cooperativa Agropecuaria, Ariel Menapace, Graciela y Benchi Ramseyer, Beto Alcaraz, Miguel Agustini, Abel Menapace, Fabbro y Menapace y José Rambaldo.
En la configuración del parque circundante trabajaron Mabel Colignon, Elda Franzoy y Pity Villan.
Con el correr de los años se han modificado algunos detalles en razón de preservarlo de las lluvias y el granizo ocasional.
Actualmente tiene una base de caño estructural, techo de zinc y hay cambios en el suelo ya que con la alfalfa las hormigas causaban daño.
También cambiaron los colaboradores ya que desde hace varios años prestan su asistencia los jóvenes de la casa El Buen Samaritano quienes bajo la dirección de René Victor arman y desarman la estructura.
Con Elda en los detalles se suman o cambian quienes colaboran, desde el año 2010 está trabajando Adolfo Romero.
Es un pesebre que en la zona nos identifica, preservémoslo, es de todos y para todos.
La Sagrada Familia desde allí nos bendice